El pago mínimo es la cantidad más pequeña que se debe pagar en un mes en la tarjeta de crédito. Eso quiere decir que no será posible seleccionar un monto inferior.
El error de utilizar constantemente el pago mínimo
Utilizar el pago mínimo de la tarjeta de crédito para financiar las compras que superan el poder adquisitivo es un error bastante común. Sin embargo, no es aconsejable usarlo, puesto que la duración de las deudas será mayor, lo que es igual a más intereses.
Emplear el pago mínimo para gastos inesperados o emergencias es una muy buena idea, pero si se hace para realizar compras innecesarias o se torna habitual esta práctica, provocaría una dependencia financiera de los bancos.
El objetivo es no crear una dependencia financiera de los bancos, ya que si eso sucede, las deudas nunca terminarán. Por eso, no caer en la publicidad de las entidades financieras es determinante, pues las deudas que generan las tarjetas de crédito son todo un negocio para ellos.
La principal desventaja del pago mínimo
El monto del pago mínimo no es fijo, como sí sucede con las cuotas de un préstamo personal, por lo cual será complicado planificar correctamente las finanzas. Es por eso que no es recomendable, ya que cuando se pagan las cuotas iguales todos los meses, la organización es más adecuada
El pago mínimo está compuesto, en su mayoría, por intereses e impuestos, por lo cual no se reducirá el capital inicial.
¿Qué pasa si no se paga a tiempo la tarjeta de crédito respecto al pago mínimo? Cuando no se paga a tiempo el pago mínimo de la tarjeta, los intereses aumentan y el puntaje crediticio disminuye.